domingo, 3 de junio de 2012

ESPECIES EN PELIGRO DE EXTINCIÓN.


Una especie se considera en peligro de extinción, sea vegetal o animal, cuando se encuentra comprometida su existencia globalmente. Esto se puede deber tanto a la depredación directa sobre la especie como a la desaparición de un recurso del cual depende su vida, tanto por la acción del hombre, debido a cambios en el hábitat, producto de hechos fortuitos (como desastres naturales) o por cambios graduales del clima.

    En el mundo se pierde cientos de miles de especies, muchas de ellas aún antes de ser descubiertas por la ciencia. De ese modo, no sólo se pierde  la variabilidad biológica, sino además la diversidad genética, fuentes de sustentos para las generaciones futuras. Una especie en peligro de extinción es una especie que puede extinguirse en un futuro próximo. A través de la historia de la evolución, millones de especies han desaparecido debido a procesos naturales. En los últimos 300 años, sin embargo, los humanos han multiplicado la tasa de extinción por mil. 
    Para todas las especies naturales, vegetales y animales, vivir constituye un peligro cotidiano, deben cuidarse de sus congéneres, especialmente del más poderoso predador que existe sobre la Tierra: el hombre. Los desastres ecológicos, la deforestación y otras consecuencias de la acción humana provocan daños en la cadena trófica. En el mundo actual la extinción de especies animales no está tan directamente relacionada con la escases de alimentos o la contaminación, como con acciones  violentas directas (la caza no reglamentada y el comercio ilegal de especies salvajes) o indirectas (la introducción de especies exóticas, en determinados ambientes, que compiten por uno o más recursos con individuos nativos o ya adaptados al lugar). 
Según los conservacionistas, la depredación de la fauna a crecido vertiginosamente y se estima actualmente que una especie desaparece cada 15 minutos.  Para la naturaleza, lo peor que le puede suceder, es la extinción de las especies, ya que con eso se pone en peligro el equilibrio necesario en todo ecosistema. En esta cadena natural, cada especie necesita de la otra para sobrevivir.  La acelerada destrucción del hábitat es pretexto de un desarrollo sin parámetros de sustentabilidad, condena a la extinción a una biodiversidad en cuyas potencialidades se basa la vida del futuro. Y aunque esta actitud represente  a simple vista una postura antropocéntrica, el hombre en su afán de búsqueda de nuevas alternativas, no puede apartarse de esa visión, pues de lo contrario la misma existencia no tendría razón de ser.  Introduciendo estos conceptos a la filosofía de la comunicación, consideramos de vital importancia contribuir a la protección de los recursos naturales, difundiendo las potencialidades de la riqueza faunística.


¿Cuáles son las principales causa de este peligro? 
1. La persecución y matanza por el valor de sus pieles. 
2. La caza intensiva y la pesca intensiva para comercializar sus carnes. 
3. La contaminación de las especies extrañas a su hábitat, o sea "especies invasoras". 
4. Los grandes emprendimientos como represas, hidrovías, etc., que el hombre construye. 
5. Pérdida de petróleo, que contaminan los mares. 
6. Accidentes naturales como la "muerte gris", erupción de los volcanes que lanza a la atmósfera nubes de cenizas y gases con alto contenido de azufre. 
7. La acción de otros contaminantes (yacimientos de uranio, polonio, radio y de otros elementos radioactivos) 
8. Accidentes varios, intencionales o no, como los incendios de bosques, choque de barcos, etc.

México en el mundo.


En la última década, las especies en peligro de extinción en México han aumento un 25%, lo que sitúa al país en segundo lugar mundial con especies en riesgo latente.
Con la publicación de la Norma Oficial Mexicana 059 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para 2010, el gobierno mexicano reconoció que hay 71 nuevas especies y subespecies en categoría de "riesgo", en comparación con 2001.
Organizaciones como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), Greenpeace, Defensores de la Vida Salvaje en México y el Grupo Ecologista del Mayab, denunciaron que el sistema para proteger a las especies silvestres es lento e inflexible y "queda a voluntad y capricho de la autoridad ambiental en turno".
La última NOM sobre las especies en peligro de extinción en México se publicó en 2001, en ésta se contemplaban a 372 especies en categoría de "peligro de extinción", lo que ahora ha aumentado a 500.
Las NOM son las regulaciones técnicas que contienen la información, requisitos, especificaciones, procedimientos y metodología que permiten a las distintas instancias de gobierno fijar parámetros evaluables para evitar riesgos a la población, a los animales y al medio ambiente.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza colocaba a México en el quinto lugar mundial de las especies el peligro, por debajo de Ecuador, Estados Unidos, Malasia e Indonesia; pero con la clasificación de la NOM 059 del 2010, pasaría al segundo lugar en las categorías de "En Peligro" y "Amenazada" con 1,203 especies.
La SEMARNAT está fracasando en su obligación de proteger y conservar a las especies silvestres de México, denunció el CEMDA.
"La NOM 059 se completó en el 2006 y durante cuatro años quedaron sin protección legal decenas de especies que fueron enlistadas por primera vez. Entre ellas el pecarí de labios blancos, que desde el 2006 se reconoció como una especie en peligro de extinción y sin embargo la Dirección General de Vida Silvestre continuó dando autorizaciones de caza porque la norma no estaba publicada", dijo Mercedes Anzures vocera de Conservación de Mamíferos Marinos de México (COMARINO).
Hace 10 años, en México se contemplaban a 41 especies como"posiblemente extintas", pero para 2010, esa cifra aumentó a 49.
"Uno de los grupos de fauna que presentó más cambios fueron los pericos y guacamayas, ya que cinco especies fueron subidas a la categoría de En Peligro, (…) con estos cambios 21 de las 22 especies que hay en México quedan enlistadas dentro de la norma y 11 especies o el 50% están en Peligro de Extinción", dijo María Elena Sánchez, presidenta de Teyeliz, A.C., una organización mexicana que estudia el tráfico ilegal de aves en México.
El 10% de todas las especies vivas del mundo pueden encontrarse en México, lo que lo convierte en uno de los países más diversos. Con 64,878 especies conocidas y más de 900 especies endémicas, es decir, exclusivas del territorio nacional, sólo Brasil, Indonesia y Colombia, igualan el nivel de vida que posee México.


Mercado negro.


Actualmente, el tráfico ilegal de especies supera los 4.000 millones de dólares al año, y sólo el contrabando de armas y el narcotráfico generan cantidades superiores. Según datos  de TRAFFIC y WWF, a consecuencia directa del comercio ilegal, unas 700 especies  se encuentran en peligro inmediato de extinción. 
Primates: Más de cincuenta millones de primates son capturados  anualmente y utilizados en laboratorios de investigación (los menos) o como animales de compañía. 
Elefantes: Unos 150.000 colmillos de elefantes (entre 600 y 900 toneladas de marfil) son esquilmados para fabricar productos artesanales o decorativos. 
Reptiles: Diez millones de pieles de reptil se destinan a la confección de bolsos, zapatos u otros productos de lujo. Parte de los reptiles van a parar a terrarios como exóticos animales de compañía. 
Aves: Cinco millones de aves son capturadas con destino a los salones de casas de países desarrollados, restaurantes de lujo y coleccionistas privados. 
Felinos: Unos quince de millones de pieles de mamíferos (nutrías, felinos, etc.) engrosan cada año lujosas peleterías en EEUU, Europa y Japón. 
Ranas: Cerca de 250 millones de ranas (sobre todo, ranas toro) son capturadas en sus hábitats naturales con destinos a restaurantes. 
Peces: Entre 350 y 600 millones de peces ornamentados son capturados  para abastecer acuarios y peceras en todo el mundo. 
Cactus: Ocho millones de cactus son recogidos clandestinamente. Su destino son  las casas de los países occidentales.
Orquídeas: Casi nueve millones de orquídeas y flores de los bosques tropicales son recolectados con destino a países occidentales. 
Coral: Más de dos toneladas de coral se convierten anualmente en ornamentos  y objetos decorativos.









LAS DIEZ ESPECIES MAS AMENAZADAS.

Algunas de las especies podrían desaparecer en las primeras décadas del siglo XXI. Su uso comercial está totalmente prohibido.
Tigre de Siberia: casado por su piel. Quedan unos 200 ejemplares. 
Nutria Gigante: capturado por su piel. Ha desaparecido en Uruguay y quedan pocos centenares en Argentina. 
Cocodrilo del Nilo: perseguido por su piel. 
Águila Imperial Ibérica: quedan unas 150 parejas en libertad. 
Tortuga Marina: perseguida por coleccionistas y  ofrecida como curiosidad en restaurantes de lujos. 
Gorila de Montaña: destinado a zoológicos, coleccionistas e institutos de  antropología. Quedan unos 600 ejemplares en las montañas húmedas del continente africano. 
Guacamayo Escarlata: importados por grandes cantidades por los EEUU. 
Rinoceronte Negro Africano: quedan unos 2.000 ejemplares. En los años setenta, su población alcanzaba los 65.000.
Panda Gigante: utilizados en zoológicos y apetecidos por su piel.  Quedan unos mil ejemplares en todo el mundo. 
Lobo Marsupial: podría haber desaparecido ya. El último ejemplar fue  avistado en la década de los ochenta.



Animales en peligro de extinción en México.


El oso hormiguero (Tamandua mexicana). Conocido también como "brazo fuerte" o "chupa miel", se caracteriza por tener un hocico alargado, pelaje color crema con un chaleco oscuro.

Este mamífero, puede localizarse en la vertiente del Pacífico desde Michoacán y la Huasteca Potosina en la vertiente del Golfo, hasta Chiapas y Yucatán.


El armadillo de cola desnuda (Cabassous centralis). Además de ser una especie en peligro de extinción, sólo se puede encontrar en las zonas de acahuales y pastizales de la Selva Lacandona de Chiapas.


El jaguar (Panthera onca). Es el felino más grande de América y el tercero del mundo. En México, habita en las selvas tropicales del sureste, hasta el río Bravo en el Golfo y en la Sierra Madre Occidental de la costa del Pacífico. Su pelaje es de color café amarillento con manchas negras de formas irregulares, es solitario y casi exclusivamente nocturno.
El mono araña (Ateles geoffroyi). Habita en los bosques tropicales, selvas altas y medianas de Veracruz, manglares de Chiapas, y en los retenes de Yucatán. El mono araña además de ser de hábitos diurnos, viven en grupos sociales permanentes y son arborícolas.
 El mono aullador o saraguato (Aloutta pigra). En México, habitan en casi todo el sur, especialmente en los estados de Tabasco, norte de Chiapas y en la península de Yucatán. Su pelaje es de color negro y su peso promedio es de 8-10 kilogramos.
El ocelote (Leopardus pardalis). Entre las variedades de felinos mexicanos, destaca el ocelote, cuya existencia  fue registrada en códices y estelas mayas. Además, representa un mes dentro del calendario azteca.

Su distribución abarca desde Sonora y Tamaulipas hasta el istmo de Tehuantepec, Chiapas y la Península de Yucatán.
El lobo mexicano (Canis lupus baileyi). También conocido como "lobo gris", es la raza más pequeña del continente americano. Debido a la destrucción de los bosques y pastizales templados que constituían su hábitat, se encuentra en peligro de extinción. Su altura ronda los 65 - 80 centímetros, y su longitud los 135 centímetros. Con un peso aproximado entre los 21 y 45 kilogramos.
El perro llanero mexicano o perrito de la pradera (Cynomys mexicanus). Esta especie endémica, corresponde a una pequeña región de valles y pastizales de montaña entre los límites de Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí y Zacatecas.

Viven en madrigueras comunicadas entre sí por una red de túneles. En realidad no son perros, sino roedores parientes de las marmotas.
La vaquita marina (Phocoena sinus). Vive en la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado. Es uno de los cetáceos más pequeños y única especie endémica de mamífero marino en México.

El gobierno mexicano ha invirtido alrededor de 30 millones de pesos para lograr su conservación, puesto que es una especie en peligro de extinción.
El teporingo (Romerolagus diazi). Conocido también como conejo de los volcanes, es una especie que sólo se localiza en las laderas de las montañas del sur, en el Nevado de Toluca y sureste del valle del país. Es el conejo más pequeño, tiene las orejas cortas y redondas. Su pelajes es de color oscuro y homogéneo.

Habita en los bosques y zacatonales subalpinos y alpinas de gran altura. Se resguarda en madrigueras propias o madrigueras de tuzas y en ocasiones en resumideros, rocas, raíces y peñascos.